A Enzo le gustan los zapatos. Así en general. Muchos días al despertarse la primera palabra que dice es |shus| mientras señala los zapatos que le he dejado preparados para ese día sobre la cómoda. Fué una de las primeras palabras que aprendió y es totalmente bilingue al respecto... Le gustan de todo tipo: zapatillas, deportivas, botas |totas|...
Pero hay dos cosas que le apasionan por encima de todo: una es ponerse los zapatos de su papá. Lo intenta cada vez que puede e incluso para mi pesar en los últimos días ha aprendido a abrir el mueble zapatero por lo que es fácil que en un abrir y cerrar de ojos uno se encuentre con todo el catálogo de modelos desplegado por el pasillo...
Y otra son sus botas de agua. Las catiuscas de toda la vida. Sus |totas|...Que obsesión! se las pone a todas horas, incluso con el pijama. Y tengo que reconocer que más de una vez las he usado en momentos de perrencha máxima para intentar calmar a la fiera....
Quien sabe, quizá tengo en casa al próximo Manolo Blanhik.
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